Las chapas.

martes 16 de septiembre de 2008 Alguna vez se ha preguntado ¿Por qué a carecaldo le dicen carecaldo? Si, la chapa, el apodo, el sobrenombre, son sinónimos de lo mismo. Esos rótulos se arraigaron a nuestra cultura, dejando en algunos casos el verdadero nombre de la persona en un segundo plano. ¿Pero porque pasa esto? ¿Es cultura o pura joda? No lo se, y este su servidor no lo entiende. El diccionario lo define como: Apodo 1. m. Nombre que suele darse a una persona, en sustitución del propio, normalmente tomado de sus peculiaridades físicas o de alguna otra circunstancia: "el Litri" es el apodo del torero Miguel Báez. Si esa caricaturización del nombre. A veces divertida, otras veces molesta, pero igual reconocida por todos. Circunstancia para un apodo. Hay infinidades, pero siempre debe haber un intlocutor, que es el que creativa o vilmente pone el apodo y un receptor que es el que asimila la chapa. De este último depende en gran medida el éxito o no del sobrenombre. Una acción, un corte de pelo, una camiseta, un olor, en fin cualquier cosa puede desencadenar un apodo o chapa, que bien puede durar 5 minutos mientras el interlocutor y el receptor hacen mofa “tiran caja” o puede acompañarte para toda la vida. Historias de Chapas. Andrés Jaramillo. Más conocido como PAPAS. Las papas, tan comunes en nuestra cultura, las hay negras, blancas, capiras, criollas, en fin, este es un país de papas. Andrés Jaramillo gustaba de comer cositas en paquetico, cheetos, galletitas y claro papas. Un DIA decidió que las papitas eran de su preferencia, el señor tendero al verlo contento comiendo dichas botanas, lo llamo amistosamente papas. Pues un inocente comentario hizo que el nombre de Andrés Jaramillo, dejara de ser relevante y el apodo papas surgió para quedarse. Andrés creció y fue al colegio, donde alguien que lo conocía lo llamaban papas, pasó lo mismo en la universidad, inclusive en el trabajo. Es la historia de cómo un apodo puede