Pepe

José Krignere, mejor conocido como "Pepe", es uno de esos jóvenes que se dicen así porque se quedaron (mentalmente) con las ideas revolucionarias de la Universidad. Criado en el seno de una familia judío-musulmana, este peculiar sujeto demuestra su devoción todo el año en las fiestas hebreas o en las dictadas por el Corán. Nada fácil para una persona que vive en el capitalismo del mundo cristiano, menos si se desempeña en el terreno profesional de los medios de comunicación. "Pepe", para los amigos, y los ciberescuchas, se define como un tipo de clase media, con proyectos profesionales estancados gracias a la falta de apoyo del estado y de las empresas, y claro, por su horario laboral. Su más grande tesoro es su familia, aunque por cuestiones de seguridad no se puede mencionar su nombre, ni nada de eso. Con un carácter enérgico y (dizque) entrenado por su padre (un ex miembro de las Tzavá Haganá Leisrael (Fuerzas de Defensa del Estado de Israel), "Pepe" es un tipo amigable, seguro, creativo, astuto con los que le dan su amistad. No obstante, no tolera la mediocridad, la mentira, corrupción, y otros males de nuestro amado México. Ten cuidado con él, pues no lo quisieras tener como enemigo. En cuanto a su labor en el programa "Crónicas de una noticia anunciada", Pepe considera importante decir la noticia tal y como es, sin buscar ningún partido político, ni tendencia social o económica. Siempre busca la objetividad, por eso lee, escucha y ve todas las noticias, nunca se queda con la ideología de un solo medio, pues sabe que cada uno tiene su línea política y nunca sacará lo que no le convenga. Trabaja en "Crónicas de una noticia anunciada" por amor al arte, pues no recibe un solo céntimo, algo difícil para esta persona, quien sólo anda pensando en ganar más de lo que actualmente obtiene en el ámbito profesional, donde, por cierto, "lo negrean", según comenta.